La puta lotería de Navidad publicado por Fry

Hoy es de esos días del año en los que, si no sabes de qué hablar, recurres al tema principal: la lotería. Reconozco que odio la lotería de Navidad. No te toca una mierda y además te sientes obligado a comprarla.

Cada año he ido reduciendo la cantidad de lotería con la que juego y he perdido totalmente el interés por ella. No hay nada peor que ilusionarse con algo que es altísimamente improbable que ocurra. Además, esta lotería está basada en la envidia. No puede ocurrir que le toque al resto de compañeros de gimnasio, trabajo, grupo de amigos, familia, etc. y no a uno mismo. No importa que le toque al resto de la gente, pero nunca a nadie cercano y más si lo van a celebrar por todo lo alto en tu cara.

Eso sí, este año he tenido suerte y entre las (muy improbables, aunque parezca lo contrario) pedreas y la terminación del gordo he salido en tablas.

¿No hay mejor forma de invertir los 50, 100, 200 o la cantidad de euros que quieras?

Y una cosa es cierta, aunque esté mal que lo diga, me jode profundamente ver cómo lo celebran por la tele. Menos mal que no los tengo cerca. ¿Seré tan hijo de puta?