La operación salida (y entrada) no existe
publicado por Fry
He sido uno de los cincuenta mil millones de desplazamientos que ha anunciado la DGT para estas fechas, con salida el 23 hacia la capital y regreso el 25 y puedo volver a decir, con la experiencia que he ido almacenando durante todos estos años de falsas alarmas, que las operaciones entrada y salida no existen.
Existen los atascos de Madrid, obviamente, los de todos los días y especialmente a ciertas horas, pero las carreteras están limpias. O la gente no se desplaza tanto como anuncian desde el gobierno o se tiene tanto miedo a las dichosas operaciones de tráfico que la gente se dispersa tanto en el tiempo que parecen carreteras fantasmas.
Lo mismo podría decir de los agostos, las semanasantas y cualquier otro punto conflictivo de rigor. No hagáis caso, no pasa nada.
Eso sí, la DGT ya se ha preparado para que los cuatro gatos que realmente nos desplazamos tengamos nuestras correspondientes multas por velocidad. Como primer regalo (y único) de Papá Noel me traigo una multa de 100 euros por ir a 71 km/h. en una travesía de 50. Los típicos pueblos de cuatro casas que aparecen en una carretera general son una auténtica mina recaudatoria.
En fin, feliz Navidad.
Existen los atascos de Madrid, obviamente, los de todos los días y especialmente a ciertas horas, pero las carreteras están limpias. O la gente no se desplaza tanto como anuncian desde el gobierno o se tiene tanto miedo a las dichosas operaciones de tráfico que la gente se dispersa tanto en el tiempo que parecen carreteras fantasmas.
Lo mismo podría decir de los agostos, las semanasantas y cualquier otro punto conflictivo de rigor. No hagáis caso, no pasa nada.
Eso sí, la DGT ya se ha preparado para que los cuatro gatos que realmente nos desplazamos tengamos nuestras correspondientes multas por velocidad. Como primer regalo (y único) de Papá Noel me traigo una multa de 100 euros por ir a 71 km/h. en una travesía de 50. Los típicos pueblos de cuatro casas que aparecen en una carretera general son una auténtica mina recaudatoria.
En fin, feliz Navidad.
Etiquetas: Navidad, Reflexiones
Estamos de multas hasta el moño. Menudo regalo.