Contraataque tabaquil publicado por Fry

El gobierno me vende el veneno y ahora quiere meterme en la cárcel por hacer uso de él. Desde que tiop escribió sobre el tabaco en este mismo espacio he estado tratando de buscar un hueco para contraatacar. Es verdad desde su perspectiva de no fumador fue bastante suave y “tolerante”, pero yo estoy mucho más radicalizado en mi postura de fumador. Sí, fumo porque me gusta, porque me da la gana y porque me lo venden.

La nueva ley contra el tabaco tiene como objetivo, entiendo, defender los derechos de los que quieren saber nada de él, pero tiene la contraindicación de ser una estrategia de acoso y derribo contra los que fumamos, y las cosas no tendrían por qué ser así.

Para empezar los fumadores podemos ser temerarios, pero no gilipollas y poner carteles sobre tu posible impotencia en los paquetes de tabaco es, cuando menos, una gilipollez. No creo que haya nadie en este país que se haya animado a dejarlo por la contemplación de algo que simplemente molesta, pero no por el contenido del mensaje sino porque ahora los paquetes son más bastante más feos. Pretendían poner, como ya ocurre en otros paises, fotografías de enfermos derivados del tabaco, ¿pero por qué no vamos a extender esa filosofía? Que en las gasolineras haya fotos de accidente de tráfico, o mejor en los cuentakilómetros de los coches, así no hay forma de escapar de la fotografía; que en cualquier botella de alcohol aparezcan fotografías de familias destrozadas, de hígados descompuestos o de vómitos con sus correspondientes tropezones; por supuesto que cualquier Big Mac venga forrada de fotografías de obesos a punto de explotar, de enfermedades coronarias, de grasas y de opulentos con tanga de leopardo para que te recuerden en lo que te puedes convertir; en las puertas de las discotecas vamos a poner carteles de los devastadores efectos de las drogas o adjuntar pegatinas a la entrada de los partidos de fútbol con cubos repletos de sudor. Por terminar de rizar el rizo acompañemos cada disco de música pasti una foto del neng para que seas consciente de los peligros. En fin.

Ya sabemos que a partir del 1 de enero no se puede fumar en absolutamente ningún ámbito laboral. Me parece correcto, pero la ley no ha dejado ningún tipo de margen al sentido común. No hablo más que de sentido común. Por ejemplo la posibilidad de haber pactado smoking rooms entre los trabajadores y la empresa, que si un despacho es de uso exclusivamente personal se pueda fumar o que si en una oficina en la que los dos únicos habitantes fuman y quieren que lo hagan. No hay ningún margen de maniobra y eso me jode. Por otro lado ¿qué pasa cuando trabajas desde casa? También es un espacio laboral, al menos temporalmente, ¿me van a prohibir fumar en mi propia casa? El resto de trabajadores se quejan de que salimos a fumar 5 minutos al día, pero no creo que no haya ninguno que no esté dispuesto a recuperar ese tiempo de la forma acordada si la situación lo requiere.

Otro tema son los bares y los niños. Un bar tiene que elegir entre ser de fumadores, e impedir con ello la entrada infantil, o la prohibición total del tabaco. Pero vamos a ver, a un niño se le permite entonces estar en un ambiente de borrachos y degenerados siempre que no fumen. Se permite que disfrute de cualquier tipo de ambiente y ninguno es nocivo excepto el puto cigarrillo. Los niños deberían entrar en los sitios adecuados para niños, y un bar no lo es, se fume o no se fume. De todas formas en mi comunidad, como intuyo será el resto, la practica totalidad de los bares han elegido a los fumadores en detrimento de los niños. Los más degenerados son los fumadores, que beben y que se descontrolan. Los niños se toman una naranjada en dos vasos y a correr, y la pela es la pela amigos.

Por otro lado está la manipulación de las encuestas, que es lo que más gracia me hace. Los hooligans antitabaco sugieren que a los fumadores no les cubra la seguridad social cuando tengan enfermedades derivadas del vicio. ¿estamos todos locos o qué? esgrimen datos reales, pero con la omisión de detalles fundamentales que lo convierten en una manipulación. Si queremos poner en la balanza el gasto de los fumadores vamos a meter también los impuestos que me quitan todos los días, los impuestos que dejan los miles de sectores derivados del tabaco (que también pagan) y sobre todo que cuenten con lo que se ahorra la seguridad social en pensiones con los 10 años de media que vamos a dejar de vivir cada uno. Los fumadores nos morimos rápido. Vamos a contar todo. A ver quien sale ganando.

Lo tengo clarísimo, el gobierno sabe perfectamente que todas sus medidas no nos afectan en absoluto a la hora de dejar de fumar. Lo intentaremos si queremos por otros muchos motivos como lo hemos hecho siempre. El gobierno sabe que no va a dejar de percibir un duro, sin embargo la campaña de acoso y derribo le cura en salud, porque hace todo lo que puede. Y por si hay algún fumador incauto se ha creído que es bueno dejar de fumar lo contrarresta fomentando la proliferación de tabacos de 1,35 €.

Como dirían en tierras lejanas, dejate ya de romperme las pelotas. Voy a echarme un pitillo.