Cuando el marketing falla publicado por Fry

Existen dos formas de vender una empresa. La primera, más lógica y más segura, es cubrir una necesidad. La segunda es crear la necesidad. Durante años (o siglos) se funcionó con la primera. Existían muchas necesidades sin cubrir y muchos inventos y máquinas por descubrir. Un aparato que hiciera algo que la gente no podía hacer era suficiente para consumir ese producto. La segunda variante, crear una necesidad que no existe, ha dominado la segunda mitad del siglo XX (y lo que queda).

Pero una cosa es hacernos creer que necesitamos algo que no necesitamos y nos dejemos engañar sutilmente, y otra muy distinta es que nos tomen el pelo. A ver, señores, cómo os tengo que decir una y mil veces que no, no necesito Blue-Ray, ni necesito unos minicds en carcasas para ver películas en la PSP, ni necesito la capacidad del HD-DVD cuando veo 6 películas en un DVD actual de una sola capa, ni necesito la tecnología UMTS porque no necesito nada en el móvil, ni necesito un Windows Vista que únicamente me ofrece un mejor acabado gráfico a costa de renovar mi equipo. ¿Cuándo os daréis cuenta que nadie en este planeta va a consumir ninguna de esas putas tecnologías?

¿y os daréis cuenta de una jodida vez que sí quiero consumir una mejor banda ancha? Necesito más banda ancha para ver un youtube a pantalla completa, y descargarme películas sin pagar un duro en 5 minutos, y poder ejecutar juegos sin necesidad de que estén en mi equipo, y poder acceder a todos los archivos de un ordenador remotamente como si estuviera en él a una velocidad de vértigo. ¿no os dáis cuenta de lo que necesito? Necesito tecnología que me permita piratear con más comodidad.

No os engañéis empresarios. Quiero consumir armas que me permitan piratear. Pagaré por una conexión que me valga para todo eso, para no pagar por nada más. Basta de tonterias.