¿por qué los ordenadores van cada vez más lentos?
publicado por Fry
Hoy pensaba hablar de otra cosa, concretamente de la teoría de la relatividad. Ayer, después de explicar el contenido de mi próximo post a un par de amigos, estuvimos debatiendo sobre una de las más incomprensibles ramas de la física. De hecho, estuvimos a punto de entender la curvatura del espacio-tiempo y cómo una partícula puede llegar a su destino antes de salir del punto de partida. Estoy preparando un post de "relatividad para tontos", realmente es la única forma de entenderlo, pero será para el próximo día (miércoles).
El post anterior de TioP me ha hecho volver a pensar en el problema de siempre. ¿por qué un ordenador cada vez va más lento? He estado pensando en posibles causas que lo justifiquen. Para empezar pongámonos en situación. Compras un ordenador de última generación y todo funciona de manera perfecta. Las ventanas se abren rápido, los juegos funcionan perfectamente, el sistema tarda 30 segundos en cargar,y todo correcto. Al cabo de dos años realmente se arrastra, rezando por haber sido programado con un botón de autodestrucción para así terminar con su lenta agonía. Pero, ¿por qué ocurre esto?
Por una cuestión de comparación: los ordenadores cada vez son más rápidos, y no es díficil que en la vida de tu ordenador tengas oportunidad de ver máquinas mejores en las que todo trabaja de forma fluida. Antes, cuando compraste tu ordenador, podías verlo muy rápido, pero a lo bueno te acostumbras en seguida y puede que hayas desvirtuado la realidad.
Mayores exigencias del software: si compras un ordenador de penúltima generación en principio funciona todo bastante bien. El S.O. actual corre a las mil maravillas, la versión última de office, la última versión del doom o los últimos decodificadores de video. Un usuario normal irá actualizando todas las versiones de sus programas que requieren más requerimientos de memoria, procesador y otros componentes. Puede que pienses que utilizas los mismos programas que antes, pero no es del todo cierto, las versiones suelen ser distintas y tienden a ejecutarse más lentamente.
Fragmentación del disco duro: Cada fichero que se copia en disco duro está dividido en pequeños trocitos (clusters) que no necesariamente están escritos consecutivamente en el disco. El ordenador busca huecos vacíos para escribir estos pequeños trozos y a veces se encuentran muy distantes entre sí. Cuando borramos un archivo todos los trocitos dispersos quedan libres. Este proceso ocurre constantemente y después de unos meses de uso el disco duro está demasiado "fragmentado". Cada vez que accedemos a un documento sus partes están totalmente dispersas y la velocidad es extraordinariamente más lenta. Este fenómeno es aún más acusado en la memoria virtual que utiliza windows para funcionar, que crea un megafichero en el que lee y escribe constantemente y produce unos retardos insoportables. La solución: defragmentar el disco duro para reordenar los clusters.
DLLs, fuentes, servicios de Windows, perifericos y otros: Según vamos instalando aplicaciones vamos a ir contaminando el ordenador con librerías DLLs innecesarias, entradas en la configuración del sistema, fuentes tipográficas, servicios de Windows que se ejecutan en segundo plano, archivos temporales, etc. Muchos de estos archivos no se eliminan en la desinstalación y poco a poco van poblando el sistema de basura que no sirve para nada, pero ralentiza el arranque, las tareas de comprobación, etc. A su vez, más perifericos (escáner, impresoras, cds...) cargan el sistema con más comprobaciones y programas ejecutandose en segundo plano. La navegación en internet se vuelve insufrible cuando existen demasiados archivos temporales en el disco duro y se pasa el día buscando y comprobando si existen copias locales de las fotitos de la web.
Virus, spyware, malware y otros. Pese a que siempre he defendido (y lo defiendo) que es peor el remedio que la enfermedad (yo no uso antivirus) los virus provocan efectos secundarios en el rendimiento del sistema, aunque ni siquiera sea ésta la razón de su existencia. A veces por defectos de programación en los propios virus y a veces por efectos colaterales de su verdadera misión, el resultado es que cada virus consume algunos ciclos de microprocesador en llevar a cabo sus malignas intenciones. Sin un antivirus a veces sus efectos son imperceptibles, pero el rendimiento del ordenador lo notará sin duda.
Suciedad en el ventilador: El microprocesador genera una cantidad de calor importantísima. De hecho, el calor generado por la superficie del micro es mucho más alto que una plancha de cocina (en la misma porción de espacio, claro) y hay que disiparlo con ventiladores y disipadores. Si están sucios no serán capaces de hacer escapar todo el calor y en el mejor de los casos el micro automáticamente funcionará a menos frecuencia para generar menos calor, provocando que el sistema se ralentice de manera importante (este efecto es muy acusado en los portátiles). En el peor de los casos el micro se quema o simplemente se para (la verdad, es mejor la segunda opción).
Autoprogramado para ir más lento: Es una idea conspiradora que afirma que Windows tiene un reloj interno de autodestrucción de la velocidad adecuada, para favorecer la migración a nuevos sistemas operativos y ordenadores. A su vez, los fabricantes de equipos ayudarían en la tarea con sus respectivos micros. En los ordenadores no lo sé, lo dudo, pero está claro que esto ocurre en los teléfonos móviles. Durante exactamente 18 meses funciona con normalidad aunque lo tires del Empire State. Pasado este plazo, simplemente se autodestruye.
Bueno, habrá más razones, pero espero haber arrojado algo de luz a este gran problema del que no se escapa ningun usuario (al menos de Windows).
El post anterior de TioP me ha hecho volver a pensar en el problema de siempre. ¿por qué un ordenador cada vez va más lento? He estado pensando en posibles causas que lo justifiquen. Para empezar pongámonos en situación. Compras un ordenador de última generación y todo funciona de manera perfecta. Las ventanas se abren rápido, los juegos funcionan perfectamente, el sistema tarda 30 segundos en cargar,y todo correcto. Al cabo de dos años realmente se arrastra, rezando por haber sido programado con un botón de autodestrucción para así terminar con su lenta agonía. Pero, ¿por qué ocurre esto?
Por una cuestión de comparación: los ordenadores cada vez son más rápidos, y no es díficil que en la vida de tu ordenador tengas oportunidad de ver máquinas mejores en las que todo trabaja de forma fluida. Antes, cuando compraste tu ordenador, podías verlo muy rápido, pero a lo bueno te acostumbras en seguida y puede que hayas desvirtuado la realidad.
Mayores exigencias del software: si compras un ordenador de penúltima generación en principio funciona todo bastante bien. El S.O. actual corre a las mil maravillas, la versión última de office, la última versión del doom o los últimos decodificadores de video. Un usuario normal irá actualizando todas las versiones de sus programas que requieren más requerimientos de memoria, procesador y otros componentes. Puede que pienses que utilizas los mismos programas que antes, pero no es del todo cierto, las versiones suelen ser distintas y tienden a ejecutarse más lentamente.
Fragmentación del disco duro: Cada fichero que se copia en disco duro está dividido en pequeños trocitos (clusters) que no necesariamente están escritos consecutivamente en el disco. El ordenador busca huecos vacíos para escribir estos pequeños trozos y a veces se encuentran muy distantes entre sí. Cuando borramos un archivo todos los trocitos dispersos quedan libres. Este proceso ocurre constantemente y después de unos meses de uso el disco duro está demasiado "fragmentado". Cada vez que accedemos a un documento sus partes están totalmente dispersas y la velocidad es extraordinariamente más lenta. Este fenómeno es aún más acusado en la memoria virtual que utiliza windows para funcionar, que crea un megafichero en el que lee y escribe constantemente y produce unos retardos insoportables. La solución: defragmentar el disco duro para reordenar los clusters.
DLLs, fuentes, servicios de Windows, perifericos y otros: Según vamos instalando aplicaciones vamos a ir contaminando el ordenador con librerías DLLs innecesarias, entradas en la configuración del sistema, fuentes tipográficas, servicios de Windows que se ejecutan en segundo plano, archivos temporales, etc. Muchos de estos archivos no se eliminan en la desinstalación y poco a poco van poblando el sistema de basura que no sirve para nada, pero ralentiza el arranque, las tareas de comprobación, etc. A su vez, más perifericos (escáner, impresoras, cds...) cargan el sistema con más comprobaciones y programas ejecutandose en segundo plano. La navegación en internet se vuelve insufrible cuando existen demasiados archivos temporales en el disco duro y se pasa el día buscando y comprobando si existen copias locales de las fotitos de la web.
Virus, spyware, malware y otros. Pese a que siempre he defendido (y lo defiendo) que es peor el remedio que la enfermedad (yo no uso antivirus) los virus provocan efectos secundarios en el rendimiento del sistema, aunque ni siquiera sea ésta la razón de su existencia. A veces por defectos de programación en los propios virus y a veces por efectos colaterales de su verdadera misión, el resultado es que cada virus consume algunos ciclos de microprocesador en llevar a cabo sus malignas intenciones. Sin un antivirus a veces sus efectos son imperceptibles, pero el rendimiento del ordenador lo notará sin duda.
Suciedad en el ventilador: El microprocesador genera una cantidad de calor importantísima. De hecho, el calor generado por la superficie del micro es mucho más alto que una plancha de cocina (en la misma porción de espacio, claro) y hay que disiparlo con ventiladores y disipadores. Si están sucios no serán capaces de hacer escapar todo el calor y en el mejor de los casos el micro automáticamente funcionará a menos frecuencia para generar menos calor, provocando que el sistema se ralentice de manera importante (este efecto es muy acusado en los portátiles). En el peor de los casos el micro se quema o simplemente se para (la verdad, es mejor la segunda opción).
Autoprogramado para ir más lento: Es una idea conspiradora que afirma que Windows tiene un reloj interno de autodestrucción de la velocidad adecuada, para favorecer la migración a nuevos sistemas operativos y ordenadores. A su vez, los fabricantes de equipos ayudarían en la tarea con sus respectivos micros. En los ordenadores no lo sé, lo dudo, pero está claro que esto ocurre en los teléfonos móviles. Durante exactamente 18 meses funciona con normalidad aunque lo tires del Empire State. Pasado este plazo, simplemente se autodestruye.
Bueno, habrá más razones, pero espero haber arrojado algo de luz a este gran problema del que no se escapa ningun usuario (al menos de Windows).
No pudiste haber terminado mejor: al menos de windows....