El programa imprescindible publicado por Fry

Si me preguntaran qué único programa me llevaría a una isla desierta probablemente respondería Total Commander. Es un programa imprescindible que, de alguna manera, trata de reemplazar al explorador de archivos de Windows, es decir, a la forma en la que copiamos archivos, creamos carpetas, abrimos documentos navegando hasta tal carpeta, etc.

Hay que reconocer que el Explorador de Archivos de Windows es, simplemente, nefasto. El problema es que la mayoría de la gente cree que no hay otras alternativas y ha asumido que no es sencillo (mejor dicho, rápido) copiar archivos entre carpetas.

Total Commander es la evolución de programas para consola como Norton Commader para DOS o el imprescindible Midnight Commander de Linux. Se basan, básicamente, en que disponemos de dos paneles que dividen la aplicación y, en cada uno de ellos, navegamos por una carpeta distinta. De esta forma, siempre tenemos acceso a mover o copiar archivos entre ellas.

Una de las principales diferencias entre este tipo de programas y el explorar de archivos convencional de Windows es que prácticamente todo se hace con el teclado, sin utilizar el ratón. Todos sabemos que el teclado es infinitamente más eficiente que el ratón y aumentar el número de combinaciones de teclas que conocemos y utilizamos .siempre se traducirá en mayor velocidad. Por ejemplo, para copiar archivos se utiliza F5, F7 para crear nuevas carpetas o F8 para borrar.

Pero Total Commander no es únicamente un excelente manejador de archivos, sino que ha ampliado sus posibilidades, mediante plugins, hasta el infinito. Por ejemplo, sin cambiar de aplicación, podemos grabar archivos en un cd siendo uno de los paneles el cd virgen, podemos renombrar múltiples ficheros, acceder a FTPs, desinstalar programas, recuperar archivos borrados, acceder al correo, visualizar archivos (fotografías, hojas de cálculo, etc), abrir archivos comprimidos de forma transparente, como si de una carpeta normal se tratara, búsqueda de archivos más eficiente y una larguísima lista de cosas.

Sería complicado enumerar la infinidad de ventajas que Total Commander ofrece. Cuando digo que es imprencible es que, sencillamente, casi no sé utilizar un ordenador sin él (al menos de forma rápida, directa y eficiente). Lo mejor es probarlo y darle un voto de confianza. Eso sí, estad preparados para que os vea el compañero de trabajo y diga ¿pero qué es eso? Es cierto, utilizar Total Commander es más friki que no usarlo.