Macbook Air publicado por Fry

Apple siempre se ha caracterizado por cuidar su imagen de una forma soberbia. Con esto no sólo me refiero al diseño de sus productos o de su software, sino también a la forma en la que se proyecta en la sociedad y la publicidad que hace. Ha conseguido crear una legión de seguidores fieles que no sólo están contentos con sus productos, sino que están encantados con la propia empresa. ¿Cuántas empresas pueden decir eso del ámbito que sea?

Hoy  ha comenzado la MacWorld 2008, la feria anual de Apple en la que Steve Jobs presenta todos los productos y novedades. Generalmente siempre se escapa algún bombazo como esta vez. La expectación es tal que, desde hace tres meses, no deja de especularse con los productos que se pueden presentar. Se hacen quinielas y la rumorología se expande por toda la red. El secretismo de la compañía hace que realmente nadie sepa a ciencia cierta lo que se va a presentar.

En este caso ha sido el Macbook Air, un portátil ultradelgado, realmente el más delgado del mercado actual, que se suma a las otras dos gamas de portátiles Macbook y Macbook Pro. Es precioso y extraordinariamente delgado, aunque los casi 1800 € en su versión inicial, y hasta 3000 en su versión con disco duro flash, hacen que haya que pensárselo dos veces.

No es el portátil que se ajusta a mis intereses ya que parece más pensado para quien se mueve de un lado para otro continuamente, pero se agradece ver como, una vez más, Apple ha revolucionado un sector del mundo de la informática que está muy poco explotado: el de los ultraportátiles.

Merece la pena echarle un vistazo.

Por cierto, me hace mucha gracia la política de Apple (y realmente de muchos otros fabricamentes) de equiparar el euro al dólar. 1.000 € = 1000 $.