He perdido el móvil publicado por Fry

Joder, he perdido el móvil. No puedo haber algo que más fastidie en esta vida que perderlo. Todos somos conscientes de lo importante que es, pero hasta que no se pierde no empiezas a medir las consecuencias.

Lo primero es la locura completa para recordar cuales han sido los últimos movimientos. Coincide que estaba en Madrid y que le perdí la pista muchas horas antes. Como no lo necesitaba no estás tan pendiente. Empiezo a recordar la hamburguesería, el sitio de los kebaps, cine... en fin, una locura. Por supuesto que antes de darlo definitivamente por muerto llamaré a todos esos sitios.

No hace falta decir que el móvil en sí, el aparato, no es lo más importante. No era de última generación (ya tenía dos años) y estaba bastante estropeado por fuera, pero la interminable lista de contactos es fundamental. De cualquier manera ahora me toca gastar pasta en otro. Ahora es cuando empiezas a pensar en la importancia de un duplicado de tarjeta, o de apuntar los números en una agenda en papel o el ordenador. Antes de que os pase os recomiendo encarecidamente hacerlo. Un móvil se pierde muy fácilmente, se apoya en todas las mesas y se deja en cualquier sitio. La dificultad de encontrarlo se agrava porque lo tenía sin batería, así que lo puedes tener debajo del sofá y no oirlo. En cualquier caso para entrar al cine lo puse en vibrador. En fin.

Hay muchos contactos que jamás volveré a encontrar. Gente que vas conociendo por diferentes sitios y que no tienes más referencia que su número de teléfono. Para colmo no tengo contrato, así que estoy barajando las posibilidades de, al menos, conservar mi número. Tengo una tarjeta prepago que se supone que es anónima y por tanto no reutilizable, pero igual que yo respondo gustosamente con mis datos cuando me llama Movistar espero que ahora se porte y me permite conservar el número.

Sí, estoy de mala hostia y cagándome en lo más barrido. Si alguno de mis conocidos lee esto que sepa que estaré un tiempo incomunicado.

O quizás para siempre...