Peugeot publicado por TioP

No os hablaré directamente de modelos de motor, seguridad, coche… de la propia marca, y para ser sinceros, ni siquiera de la marca en sí, sino del “inventor”, de Armand Peugeot y de la curiosidad que en su día, hace ya tiempo, me pregunté y que también en su día me respondí (bueno, me respondió internet).

Primero ambientemos en datos atractivos de este personaje. Su familia ya tenía experiencia en el sector empresarial y también en el arte de la invención. Fue el molinillo de café uno de los destacados, siendo muy popular en las casas de los franchutes. En concreto, Armand, empezó con las bicicletas, pasó por el triciclo a motor y gracias a éste, pues no chutaba al principio, empezó con los vehículos a motor, de todo tipo claro, hasta lo que hoy mayormente vienen siendo los coches. De su primer “vehículo a motor” cuatro fueron las unidades “comercializadas”, algo más exclusivo que actual Ferrari de más del millon de euros y que disfrutan (o disfrutarán) no más de 500 privilegiados (o capullos). Solo en 1891 se puede considerar que Armand Peugeot sacó el primer coche en serie y volaba a la friolera velocidad de 14km/h, fijo que las autoridades no se plantearon el tema del carnet por puntos. Pero son 5 años después cuando se consigue fabricar el primer coche 100% Peugeot.

Muy dedicado a las carreras de coches, típicas francesas entre ciudades míticas como París, Burdeos, Niza… Tal fue la pasión que muchas fueron las victorias de su marca, llegando incluso a competir en las 500 millas de Indianápolis con notados triunfos. A día de hoy, Peugeot es una de las marcas automovilísticas reconocidas del sector, y no es que tenga yo un coche de estos, pero hay modelos que en ocasiones quieren atraerme. Cierto que uno de los primeros coches de mi familia fue un 405, y nada malo.

Y como última curiosidad, y quizá la que desde un primer momento quería contaros es. ¿Por qué todos los modelos de Peugeot, hoy día, están compuestos por un cero intermedio? Por si no lo sabíais, aunque fijo alguna vez os lo preguntasteis como yo, todo viene porque hace ya una tira de años, los coches se arrancaban con manivela, algo parecido a los aviones antiguos de hélices frontales. El caso es que para colocar el agujero en donde enganchar la palanca aprovecharon el cero de la numeración del vehículo sobre el que lo estaban colocando. Así lo hicieron para todos los modelos y de ahí que por “tradición” se continúe con la cifra del 0. Y sino, mirad, 106, 206, 405, 406, 407, 605... Pero ¿sabíais que están patentadas todas las cifras de tres dígitos en cuya combinación aparezca un 0 en el medio? Pues sí.

Hoy en día, el cero, lejos de ser utilizado para poner la palanca, se ha usado, al menos en el 407, para poner la apertura del maletero. Forma curiosa de darle utilidad, aunque SEAT utiliza directamente la S, otra forma original.