Psiquiatría insólita: Paruresis
publicado por Fry
El problema no es grave en mi caso, únicamente se corta si sientes la presión de miradas ajenas, no teniendo ningún problema en solitario por insalubre que se encuentre el baño, sin embargo los casos de paruresis tienen varios niveles de gravedad. Al parecer el problema es mucho más importante en Estados Unidos que en Europa, debido principalmente al diseño de sus baños. La mayoría de ellos, al contrario que en España, son largas hileras cuál barracones militares sin más separación entre ellas que la bragueta y las manos. En esa situación se encuentra intimidado cualquiera. En este tipo de baños se da un caso curioso, que nos ha ocurrido a todos, y es que no sabes dónde mirar. Si miras hacia un lado rápidamente apartas la mirada para que nadie piensa que intentas observar miembros ajenos y, ese mismo nerviosismo, hace que la mirada se escape de vez en cuando a lugares prohibidos. Esas cosas pasan hasta en las mejores familias.
El problema para las féminas (o para prácticas más escatológicas) no es mejor. Los váteres suelen dejar a la vista los pies, con los pantalones y la ropa interior remangada en la parte de abajo a la vista del personal. El sufridor/a se sabe expuesto a miradas desde el exterior y esto no favorece la relajación de esfínteres. Y aún es más, terminada la faena, al ponerse de pie, su cara será vista por la parte superior, ya que tampoco son excesivamente altos. Parece de película de terror (o de risa, por lo menos), pero es algo bastante habitual en tierras yanquis. Tanto es así que los americanos ven como un relax mear en Europa.
La mayoría de la gente que sufre este problema suele recurrir a lo que llaman un “pee buddy” que es un compañero-amigo que no sufre este problema y, al parecer, relaja a quien lo practica. En mi caso es al contrario, y es la compañía la que suele evitar que llegue a buen puerto. Por supuesto no es sólo el ser observado lo que plantea problemas de incontinencia, sino el simple hecho de ser escuchado u olido, por lo que se recurren a prácticas como tirar de la cadena previamente o llevar colonias (eso lo hacen otros claro, no yo). Los casos más graves van desde la imposibilidad total de mear fuera del trono particular hasta gente que tiene un mapa mental de sitios a los que puede o no puede ir.
Cómo nos complicamos la vida con algo tan sencillo. Aunque ya que estamos, ¿cómo es posible que a estas alturas de vida en las que con un botón se hace absolutamente todo tengamos que levantarnos para ir al baño cada x tiempo? Exijo presupuesto en investigación para atajar el problema. ¿una sonda tal vez?
Etiquetas: Ciencia
Genial. Soy otro de los afectados por la fobia.