Historia de la informática (I) publicado por Fry

Poco más de 10 años nos separan de la prehistoria informática. Tan poco tiempo y tanta información para absorber dejan anulado a cualquiera. Para quienes desde que tenemos conocimiento hemos sentido la inagotable curiosidad de intentar entender todo lo que ocurre dentro de un ordenador no nos están poniendo las cosas nada fáciles. Es verdad que cuando eliges dedicar tu vida a cualquier rama de la informática asumes que vas a estar toda tu vida estudiando y reciclándote para poder estar a día, pero las cosas se han desbordado por todos los sitios.

Hace algunos años era posible conocer en profundidad todos los programas y suites del mercado, se podían dominar perfectamente todos los lenguajes de programación usuales (Ensamblador, Pascal, Basic y C), podíamos conocer todas las opciones del ordenador y de todos los periféricos que teníamos instalados y podías absorber hasta el último juego que salía. Por si fuera poco éramos necesarios ya que por aquel entonces el uso de un ordenador no estaba preparado para el común de los mortales, así que el aprendizaje además de interesante te separaba de lo que podía hacer el resto de la gente. Para echar una partida al matamarcianos te necesitaban.

Pretendo, a lo largo de unos cuantos post que iré escribiendo cuando me apetezca, hablar de la evolución de la informática desde mi propia perspectiva, viéndolo desde distintos puntos de vista. La evolución de la informática a través de los juegos, a través de internet, de la usabilidad, etc, pero desde un punto de vista muy poco técnico. Empezaré con el inicio de la informática doméstica en los PCS.

La época oscura: el MSDOS

El inicio del emporio Microsoft y de toda su fortuna. Era el sistema operativo en estado puro, una pantalla negra, sólo texto y ahí te las compongas. Todo lo que necesitabas hacer pasaba por conocer comandos específicos para ello. Era realmente muy poco amigable, pero tenías la sensación de estar controlando una máquina y de conocerla y eso producía cierto placer. Para instalar la última aventura gráfica tenías que pelear con los archivos de arranque (config.sys y autoexec.bat, qué míticos y qué olvidados¡), gestionar manualmente la memoria, cargar y descargar drivers, reconfigurar la tarjeta gráfica, crear carpetas (antes directorios) y un sinfín de esotéricas manipulaciones. Eso sí, si llegaba a funcionar ya nunca más volvería a dar problemas.

Por supuesto sólo se podía hacer una cosa simultáneamente y cosas que ahora parecen sencillas requerían bastante tiempo o eran sencillamente imposibles. Por ejemplo si querías escuchar música sólo escuchabas música, no podías hacer otra cosa. De hecho el MP3 aún no había nacido y preferíamos poner un cd en la cadena de música. Si querías escribir un trabajo debías cerrar antes lo que estuvieras haciendo en ese momento y abrir el nuevo programa. Tecleando todo por supuesto.

A pesar de todo fue una gran etapa para la informática, fueron buenos años de mucha creatividad y pocos recursos. No teníamos donde encontrar información, ni se podían compartir los logros a gran escala como ahora y el pirateo se hacia en disquetes que rulaban de mano en mano como rosquillas pirateándolo todo. Te tenías que sacar las castañas del fuego y aprendimos mucho de todo. Mucho más tarde llego el CD y todavía recuerdo las primeras grabadoras que valían 600 o 700 mil pesetas y nos juntábamos entre varios para comprar compact piratas a 6 o 7 mil llenos de programas y cosas. En aquellos tiempos el contenido de un cd podía ser bastante más grande que el disco duro de muchos ordenadores así que se dosificaba el contenido. Realmente todo duraba más tiempo. La incansable voracidad de consumo informático aún tardaría algunos años en llegar. Se le sacaba mucho partido a todo lo que caía en tus manos.

Pero toda esta austeridad de medios y de tecnología en los PCs no se daba en otras plataformas. Existían ya Apple y su Macintosh y Commodore con sus Amiga (del que yo venía) que estaban a años luz de evolución informática. La lucha era encarnizada e incluso los usuarios hacían ridículas canciones con maravillosos trackers en contra de otras plataformas. Por si fuera poco las primeras consolas Nintendo y Megadrive se empezaban a imponer con indudable superioridad y era necesario un salto cualitativo en el PC.

Recuerdo con cariño toda esa época.

Próxima entrega: Historia de la informática (II) – Las invasión de las pantallas azules