Niño malo publicado por freddd

La pregunta a la que trato de responderme a mi mismo en esta lluviosa tarde de marzo es si existen los supermalos. Me refiero con ello a malos de la talla del malo de Titanic por citar un conocido y claro ejemplo que en este caso además de la maldad del personaje en sí coincide con lo nefasto del actor que lo interpreta (no creo que haya alguién que dude ninguno de estos dos puntos).

Supongo que todos conocemos algun que otro personaje que vive para hacer la vida imposible a los demás, un compañero de trabajo, un jefe, un cliente, un familiar, un vecino, da igual el vínculo que se tenga con la persona, cuando llega sabemos que es malo y por norma tiende a hacer todo bajo esa premisa. Pero me gustaría saber si esa maldad esta en los genes, si las personas ya nacen siendo malas o si es el transcurso de su propia vida lo que las vuelve así. Yo soy más bien de la opinión de que aunque lógicamente los acontecimientos van transformando y puliendo a las personas y conformando su carácter hacia un lado u otro, si que existe una importante inclinación genética hacia una de las líneas.

Quien no recuerda al típico gamberrete de clase que probablemente ya era el más rebelde en la cuna, ese chaval fue el primero que fumaba cigarrillos cuando el resto aún nos entreteníamos con las chucherías y los triskis, fue el quien nos enseñó las primeras revistas porno y nos descubrió el maravilloso mundo del sexo. Algún tiempo después cuando nosotros fumamos los primeros cigarros el ya los sazonaba con una sustancia llamada Hachís. Por aquel entonces aquel chaval estaba en todas las peleas que se organizaban entre colegios rivales y era el cabecilla de los amotinados cuando había problemas en clase. Cuando ya le perdimos la pista al tiempo escuchamos que había dejado embarazada a una jovencilla y que se había metido en el mundo de las drogas, las drogas de verdad. Tal vez alguien comentó que lo habían pillado con algo más de la cuenta y que acabó en alguna cárcel del sur. Esta pequeña historia es un reflejo de lo que hablo pero las hay en todos los ámbitos en que nos encontramos, y no necesariamente con un final “infeliz”. Este anónimo chaval acabó en la cárcel como muchos otros (tristemente verídico) lo hicieron en la cuneta de alguna carretera secundaria una noche de sábado. En otros ámbitos, individuos de mal vivir se forran con la trata de blancas, con el tráfico de armas o la venta internacional de drogas y estupefacientes o malviven en las calles como sicarios en las bandas latinas o robando chalets de lujo. Probablemente los destinos de todos ellos caminaban en la misma dirección aunque algunos tuvieron más suerte que otros. También tenemos a los malos populares, los que han pasado a la historia como los más malos de todos los tiempos y entre otros están Calígula, Nerón, Atila, el rey de los Hunos, Torquemada, Rasputín, Stalin, Hitler…

El mal, como todo es algo que nos persigue, con el que coqueteamos todos de vez en cuando y del que tenemos que administrar pequeñas dosis que no afecten de forma importante a nuestra vida ni a la de los demás. Lo canalizamos a modo de pequeñas “travesuras”. Los limites de la bondad humana existen, no estamos en los mundos de Yupi, así que tratamos de buscar el equilibrio entre el bien y el mal, para acomodarnos en el punto correcto en el que cada uno queremos estar. Y yo he bajado un poco en el ranking, esta noche voy a pecar.